Page 16 - EMMILIA ELENA JIMENEZ SANDOVAL
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Además de ser un conjunto de criterios, asunciones y principios teóricos sobre la
práctica educativa, también es un marco metodológico que recomienda la realización de una
serie de acciones que debe desarrollar el docente como profesionales de la educación.
La investigación-acción suele conceptualizarse como un “proyecto de acción” formado
por estrategias aplicables vinculadas a las necesidades del docente que investiga, o equipos de
investigación. Este proceso que se caracteriza por su carácter cíclico, ya que es un vaivén
entre la acción y la reflexión, de manera que ambos momentos quedan integrados y se
complementan.
Esta manera de investigación, da oportunidad de vincular es estudio de los problemas
en relación a la acción social, alcanzando conocimientos y cambios sociales.
Es por ello que, la investigación-acción abre paso a la reflexión sobre las acciones y
situaciones sociales vividas por el docente cuyo objetivo es ampliar la comprensión de sus
problemas prácticos por medio de otras acciones que tienen el propósito de modificar la
situación una vez que se logre una comprensión más profunda de los problemas.
Para Latorre, A. (2005), investigación-acción es vista como una indagación práctica
realizada por el profesorado, de forma colaborativa, con la finalidad de mejorar su práctica
educativa a través de ciclos de acción y reflexión.
Así mismo, permite que, dentro de las prácticas profesionales, se aplique el
descubrimiento y resolución de los problemas a los que me enfrenté, para llevar a la práctica
mis valores educativos, a partir de una reflexión simultánea sobre los medios y los fines que se
tienen.
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