Page 17 - YESSIKA MONSERRATH MARQUEZ CABELLO
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Estas barreras como lo menciona Ainscow (2015), se subdividen en tres categorías;
actitudinales, que pueden verse reflejados en el docente, alumnos o padres de familia,
algunos ejemplos de este tipo de barrera son: el rechazo, la exclusión, la segregación, entre
otros. También está la subcategoría de barreras pedagógicas, es donde se ve inmerso
meramente el sistema y el docente mismo, algunos de los ejemplos de esta barrera pueden ser
prácticas de aprendizaje que no favorecen al canal o estilo de aprendizaje del alumno, o falta
de adecuaciones.
Por último, se encuentran las barreras de organización, mismas que influyen directamente
el ámbito físico, como son las instalaciones de la escuela, la distribución inadecuada del
mobiliario, o falta de orden y estabilidad en el trabajo dentro del aula.
Todo esto influye para que el alumno con o sin discapacidad, disminuya en su rendimiento
académico, que es en ese preciso momento, cuando los docentes de educación especial
intervienen en la situación.
En base a la información, se tiene como propósito ponderar que se brinde una educación
que tienda a desarrollar la capacidad de un aprendizaje, pero sobre todo tener la iniciativa de
crear una escuela inclusiva, con el derecho de todos recibir la misma educación.
Uno de los artículos que es parte medular de la educación especial es el 64°, ya que, en la
aplicación de esta ley, se garantiza el derecho a la educación a los alumnos con condiciones
especiales o que enfrenten barreras para el aprendizaje y la participación.
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