Page 42 - PAULINA MARIELA RODRIGUEZ LIÑAN
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Si bien, es cierto que la inclusión es un proceso continuo que requiere un análisis
crítico y reflexivo sobre las barreras que impiden la participación plena de los estudiantes en
la vida escolar. Esto implica evaluar la cultura escolar, los currículos y las comunidades de las
escuelas para identificar las barreras y desarrollar estrategias para superarlas.
Es fundamental que las escuelas promuevan un entorno educativo que valore la
diversidad y la inclusión de todos los estudiantes, incluyendo aquellos con discapacidad
intelectual. Esto implica crear oportunidades para la participación plena de todos los
estudiantes en la vida escolar y asegurar que las barreras a la inclusión se identifiquen y
aborden de manera efectiva.
Uno de los factores que genera desigualdad en los sistemas educativos de América
Latina es la segregación social y cultural de las escuelas, que reproduce la fragmentación
presente en las sociedades y limita el encuentro entre distintos grupos. Una de las señas de
identidad de la educación inclusiva es precisamente el acceso a escuelas más plurales que son
el fundamento de una sociedad democrática.
Es importante destacar que la segregación en las escuelas no solo limita el encuentro
entre distintos grupos, sino que también puede excluir a las personas con discapacidad
intelectual. La educación inclusiva, por otro lado, busca precisamente eliminar barreras y
garantizar el acceso a la educación de calidad para todas las personas, independientemente de
sus diferencias individuales.
En este sentido, la inclusión no solo se trata de aumentar la participación de los
estudiantes en la cultura y los currículos de las escuelas, sino también de garantizar que todas
las personas tengan acceso a una educación de calidad en un entorno que promueva la
diversidad y la equidad. Por lo tanto, es fundamental que los sistemas educativos de América
Latina trabajen en la eliminación de la segregación y la promoción de la inclusión para
asegurar una educación de calidad para todas las personas, incluyendo a las personas con
discapacidad intelectual.
Continuando con los autores Mel Ainscow y Miles (2019), afirman que los sistemas
educativos de todo el mundo se enfrentan al reto de ofrecer a los niños y los jóvenes una
educación de calidad. Considero que es importante destacar que las personas con discapacidad
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