Page 41 - PAULINA MARIELA RODRIGUEZ LIÑAN
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La importancia de utilizar la información disponible para desarrollar una enseñanza
más inclusiva para personas con discapacidad intelectual es fundamental para que los
profesionales de la educación se informen y aprendan sobre las mejores prácticas y estrategias
para apoyar el aprendizaje y la participación de todos los estudiantes, independientemente de
sus habilidades o discapacidades. Esto puede conducir a una práctica educativa más inclusiva
y efectiva que fomente el aprendizaje y el desarrollo de todos los estudiantes.
Un aspecto clave de la inclusión es conseguir la plena participación de todas las
personas en las diferentes esferas de la vida humana. Actualmente, existe cierto consenso
respecto a que la exclusión va más allá de la pobreza, ya que tiene que ver con la dificultad de
desarrollarse como persona, la falta de un proyecto de vida, la ausencia de participación en la
sociedad y de acceso a sistemas de protección y de bienestar.
Como se ha mencionado anteriormente se destaca que la inclusión implica la plena
participación de todas las personas en diferentes aspectos de la vida, incluyendo la educación.
Esto es especialmente relevante para las personas con discapacidad intelectual, que a menudo
enfrentan barreras que les impiden participar plenamente en la sociedad.
Se refiere a la exclusión social y la falta de oportunidades para desarrollarse como
persona y participar plenamente en la sociedad. La exclusión social puede ser resultado de la
discriminación, la falta de acceso a la educación, el empleo y los servicios de atención médica,
entre otros factores.
La exclusión social es un obstáculo importante para la inclusión, y puede ser resultado
de la discriminación y la falta de acceso a oportunidades. Las políticas y prácticas educativas
deben centrarse en la inclusión y la igualdad de oportunidades para todos los estudiantes,
incluyendo a aquellos con discapacidad intelectual.
Mencionando autores, Tony Booth y Mel Ainscow (2000) definen la inclusión como
un conjunto de procesos orientados a aumentar la participación de los estudiantes en la
cultura, los currículos y las comunidades de las escuelas. Para estos autores, la inclusión
implica que los centros realicen un análisis crítico sobren lo que se puede hacer para mejorar
el aprendizaje y la participación de todos.
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