Page 10 - ALEJANDRA ABIGAIL LONGORIA PAULI
P. 10
segunda variable se refiere a las características previas del sistema familiar: el tipo de relación
existente, nivel cultural y socioeconómico, el sistema de creencias, capacidad de adaptación
a los cambios, ambiente emocional, nivel de cohesión de sus miembros, la capacidad de
diálogo, y la capacidad organizativa
La familia en su conjunto, al igual que cada miembro de manera individual, ante la
aparición de la discapacidad experimenta una serie de sentimientos, muchas veces contrarios
al sistema de creencias de la persona, lo que hace que los oculte, los niegue, los rechace,
incrementando de este modo el dolor y el aislamiento. Estos sentimientos son diferentes entre
los miembros de la familia, y pueden entrar en conflicto creando situaciones de enorme
inestabilidad. La negación, el enfado, el miedo, la confusión, la desilusión, la tristeza, la
depresión, la aceptación son diversas reacciones emocionales, las cuales son las más
frecuentes ante la llegada de la discapacidad al núcleo familiar. Cuando algunos de estos
sentimientos predominan de forma intensa, surgen los conflictos que trascienden al ámbito
social.
La incorporación en la familia de una persona con discapacidad presenta diferentes
momentos de tensión que van desde la noticia del diagnóstico, que es el de mayor impacto,
a nuevas situaciones que surgen a medida que pasa el tiempo: escolarización, adolescencia,
envejecimiento, y es necesario conocerlas para anticiparlas y asumirlas con mayor integridad
y con ello evitar o reducir las situaciones conflictivas.
Ortiz (2007) señala que cuando el hijo/a con discapacidad ingresa a la escuela, los
padres de familia pueden tener diversas actitudes hacia la escolarización de estos y sobre
todo a la inclusión tanto escolar como social de su hijo/a. Los padres de niños con
discapacidad experimentan frecuentemente fatiga, depresión, baja autoestima, e
insatisfacción interpersonal. Aunque dichas actitudes guardan una relación directa con la
clase de discapacidad que el niño presenta.
De acuerdo con lo que mencionan Jiménez y López (2009) las primeras interacciones
familiares son decisivas en el desarrollo humano, por lo que serán los padres, los que
desempeñen un papel especialmente condicionador de las interacciones que se establecen
entre ellos y el desarrollo posterior del niño. Por ello, habrá que tener en cuenta que los
padres, al enfrentarse ante la discapacidad experimenta reacciones emocionales diversas en
función de las dimensiones y características de la deficiencia.