Page 31 - CLAUDIA VALDEZ HERNANDEZ
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                         Los alumnos con otras condiciones son aquellos con Trastorno del Espectro Autista

                  o con dificultades severas de aprendizaje, de conducta o de comunicación.
                         Aunque en esta definición, solo se hace mención a la dificultad o trastorno, pero no

                  se identifica ninguna descripción de los mismos como sucede en la discapacidad o en la de
                  aptitudes sobresalientes.

                         La Secretaría de Educación Pública en el Acuerdo 04/02/19 (SEP, 2019) define las
                  Dificultades severas de aprendizaje como:

                         Las dificultades que se manifiestan al adquirir y desarrollar habilidades para escuchar

                         (poner atención y descifrar un mensaje), leer, escribir o realizar cálculos matemáticos.
                         Excluye  de  esta  definición  a  los  educandos  cuyas  dificultades  se  deben  a  una

                         discapacidad o a situaciones ambientales como: ausentismo, diferencias culturales o
                         lingüísticas,  rezago  educativo,  desnutrición,  o  bien  cuando  el  alumno  recibe  una

                         didáctica insuficiente o inadecuada (p. 6)
                         La  condición  de  trastornos  de  aprendizaje  ha  sido  ampliamente  discutida  por  la

                  comunidad científica en el marco de la neuropsicología, a partir de discrepancias que han

                  impedido unificar criterios para el diagnóstico y la intervención; sin embargo, un punto de
                  convergencia es que hacen referencia a aquellas dificultades que presentan algunos niños en

                  el aprendizaje de la lectura, escritura y cálculo, quienes a pesar de contar con un adecuado

                  desarrollo  intelectual,  sensorial,  socio-emocional,  cultural  y  de  enseñanza,  no  logran  los
                  aprendizajes esperados (SEP, 2020).

                         Existen dos enfoques que se han destacado con relación al enfoque que se les da a los
                  trastornos severo de aprendizaje: el cognitivo y el derivado de la escuela histórico cultural

                  (SEP, 2020);
                         En el enfoque cognitivo, se establece la diferencia entre los trastornos adquiridos y

                  los trastornos del desarrollo, estos últimos producto de una alteración en la maduración del

                  sistema  nervioso  que  se  manifiestan  en  dificultades  para  integrar  capacidades  básicas
                  implicadas  en  el  procesamiento  de  la  información:  percepción,  memoria,  lenguaje  y

                  pensamiento, entre otras
                         Se asume que además de las alteraciones que pueden presentarse en estos procesos

                  mentales, las estrategias implementadas por parte del adulto, o a la falta de su uso por parte
                  del niño, así como la insuficiente automatización de las habilidades implicadas en la lectura,
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