Page 32 - DIANA SOFIA MATAMOROS LEURA
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Según el DSM IV en el 2002, confirmo que el autismo no es una enfermedad, sino más bien
un desorden del desarrollo de las funciones del cerebro. Los síntomas de autismo suelen aparecer
durante los primeros 3 años de la niñez y continúan a través de toda la vida. Aunque no hay cura,
el cuidado apropiado puede promover un desarrollo relativamente normal y reducir los
comportamientos no deseables.
Este trastorno se define como disfunción neurológica crónica con fuerte base genética que
desde edades tempranas (los primero 30 meses de vida) se manifiestan con diferentes sintomas
que se basan en la tríada de Wing: interacción social, comunicación y ausencia de flexibilidad en
el razonamiento y comportamiento. En algunos casos existen individuos que pueden llegar a ser
agresivos.
Respecto a lo mencionado anteriormente, se debe aclarar que el autismo no es ninguna
enfermedad y ninguna discapacidad, es un trastorno neurólogico que se desarrolla en los
primeros meses de vida, y los síntomas empiezan a minifestarse en el primer año de edad,
aunque lamentablemente suele detectarse muy posteriormente, debido a la falta de conocimiento
del trastorno.
Lorna Wing (1979) remarcó que, aunque el Síndrome de Asperger y el Autismo tenían
diferencias cualitativas, las áreas de afectación eran las mismas:
Posteriormente en 1981 identificó tres grandes áreas afectadas, las cuales dieron lugar a la
denominada tríada de Wing, siendo estás áreas:
Competencia de relación (social): Pensamiento literal y rigido.
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