Page 31 - XIMENA RODRIGUEZ RODRIGUEZ
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- Establecer una relación positiva con la persona con TEA.
- Así como adaptar el contexto escolar.
La implementación de recursos psicopedagógicos en los centros educativos, se enfoca
en responder a las necesidades educativas específicas que el estudiante presenta, brindando los
apoyos que requiera para su desarrollo integral, es decir, visualizando las potencialidades
cognoscitivas, afectivas y sociales Alcaráz & Lozano (2010).
Es recomendado emplear un modelado verbal para facilitar la comprensión de discursos
complejos, que fomente el contacto visual al dar consignas, que sea capaz de generalizar los
aprendizajes a otros contextos, que sea capaz de marcar con claridad la duración de cada
actividad, esto ayudará al niño a predecir su rutina habitual, que utilicen estrategias de
compensación y motivadoras para garantizar un adecuado comportamiento, que empleen
reforzadores sociales positivos para dar reconocimiento a sus logros, que sean capaces de
identificar y utilizar las fortalezas del alumno o sus intereses especiales en la planificación de
actividades y que se haga un seguimiento en la comprensión del material adaptado y de las
consignas establecidas Gartzía, N. (2014).
En cuanto a las adaptaciones del ambiente, las estrategias apuntan a establecer una
estructura en el ambiente, es decir, organizar el aula teniendo en cuenta las características del
niño. Es necesario obtener una visión general de las necesidades sensoriales del niño.
Asimismo, según Brock, et al., (2015) los recursos didácticos constituyen el apoyo
fundamental en los procesos de enseñanza y aprendizaje de los niños con TEA, ya que les ayuda
a construir un mundo de significados compartidos que les permita establecer interacciones
efectivas con otros a fin de operarlos y manipularlos dentro de sus tareas diarias y del entorno
en el que operan.
Las secuencias de eventos, tareas, actividades y exámenes se comprenden mejor en
forma de sucesión y, para ello, el uso de láminas, dibujos, pictogramas, mapas, esquemas,
fotografías, videos, palabras escritas, objetos de referencia, horarios individuales, agendas
diarias, cronogramas de trabajo, imágenes con textos que vayan acorde al desarrollo del niño
serán favorables Baxter, et al., (2020). Además, es idóneo que los materiales se planteen de
manera sistemática y secuenciados, es decir, descomponiendo una actividad en pequeños pasos,
las tareas deben emplearse en pequeñas secciones manejables con un comienzo y final claros,