Page 37 - MARTHA BERENICE ARELLANO RODRIGUEZ
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Se elabora de igual manera una historia clínica del alumno en la cual se espera integrar
diversas fuentes de información, para que después se pueda hacer la valoración clínica y poder
llevar a cabo el diagnostico diferencial.
Se realizan diversas investigaciones en los antecedentes familiares, para tener
conocimiento sobre si a un familiar o en los padres existe algún diagnóstico o evidencia de
sintomatología atribuible a un TDAH, de igual manera conocer los antecedentes psiquiátricos de
los padres de familia es sumamente importante para descartar un riesgo relativo del TDAH. Se
debe saber la historia de obstétrica, es decir como fue el desarrollo del embarazo en el caso del
menor y la madre, si en algún momento del embarazo la madre estuvo expuesta ya sea a la
nicotina, alcohol, drogas, hipertensión arterial o estrés materno durante la gestión ya que se
puede asociar a un mayor riesgo de TDAH en el producto.
Lo más importante es una valoración del desarrollo temprano del individuo, así como es
la exploración física y neurológica del niño, para descartar otras causas que puedan causar o dar
pauta a la sintomatología presente en el niño o en todo caso se podría diagnosticar una patología.
Hacer hincapié en enfermedades o tratamientos que pudieran afectar el funcionamiento cognitivo
del alumno. Conocer acerca de cómo fue la evolución del estudiante a nivel psicomotor, control
de esfínteres, adquisición del lenguaje, suelo y su alimentación, indagar acerca de los rasgos
temperamentales del educando, ya que los trastornos de la conducta se relacionan con el TDAH.
Otro tema que es necesario analizar la historia de salud mental del alumno y si existe
algún tratamiento previo, así como la respuesta a acontecimientos estresantes como lo son:
muerte familiar, maltrato, abuso sexual, separación de los progenitores o bien estados de
depresión.