Page 41 - PAOLA GUADALUPE MIRELES ALEMAN
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Lengua Materna y lectura de manera que se enriquezca el avance del lenguaje y la
comunicación, aunque no se deben despreciar todos los escenarios posibles para
desarrollar una comunicación funcional, individual. El educador debe conocer qué
hacer con un niño con trastornos de pronunciación, vincularse estrechamente con los
restantes especialistas para orientar oportunamente a la familia y al niño.
La adquisición del lenguaje es un es un largo proceso complejo que permite que
el niño adquiera el dominio suficiente de la lengua que se habla en su entorno familiar y social
para poder interactuar en él. Tiene lugar en muy poco tiempo y a una edad muy temprana.
Asimismo, cada niño seguirá su propio ritmo, pero es importante que sea guiado en el proceso
para que logre adquirir el lenguaje oral y se pueda comunicar en los diferentes contextos en los
que se desenvuelve. Existen algunos ítems que deben cumplir a cierta edad, en eso nos
basamos para evaluarlos, algunos autores que hablan sobre los hitos del desarrollo son Piaget,
Vygotsky y Bruner. Así mismo, es importante conocer los procesos de cada alumno y de ahí
partir y trabajar con ellos la articulación, la respiración, etc.
En el control de la articulación intervienen: el oído, la respiración, el soplo, y la
capacidad de movilidad de los órganos buco fonatorios como: lengua, labios, dientes, paladar,
maxilar, etc., puesto que el lenguaje es un elemento primordial en la comunicación y ésta es
una necesidad natural de las personas, la escuela debería establecer situaciones que favorezcan
el deseo y la necesidad de esta a partir de experiencias próximas al alumno: sus juegos,
vivencias y su propia actividad, y no desde situaciones extrañas, ajenas o superiores a sus
intereses y capacidades.
Halliday (1982) les otorga valor a juegos lingüísticos del niño, tales como versos,
rimas, adivinanzas, porque refuerzan este uso del lenguaje.
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