Page 37 - REGINA COELI ARREDONDO SANCHEZ

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unos índices elevados de fracaso escolar, dificultades de aprendizaje... estos hechos

provocan estados emocionales negativos.

Tomando en cuenta lo anterior se deduce que las emociones están presentes en todos

los contextos y situaciones del ser humano puesto que van ligadas a la relación interpersonal
e intrapersonal. Contar con una buena educación emocional permitirá al ser humano percibir

las necesidades, motivaciones, interés y metas personales y de los demás, además de que

ayudan también a establecer acuerdos y procesos en la toma de decisiones con un clima
emocional positivo sin que intervengan otros aspectos.

2.1.4. Las Competencias Socioemocionales de los Docentes
Como se ha mencionado con anterioridad los centros educativos son el principal

escenario formativo de socialización del ser humano. Quienes intervienen en estos procesos
son los agentes educativos y en mayor parte los docentes que se encuentran frente a un grupo,

estos además de crear experiencias académicas y ser quienes guíen el aprendizaje son

también quienes aportan a las reacciones, emociones, relaciones y creación de vínculos en
ese ambiente.

Por lo tanto, las diferentes relaciones que se establecen en la escuela resultan
fundamentales para la comprensión del rol y desempeño de la persona en la construcción de

una sociedad basada en el respeto, la tolerancia, la paz y la integración de todos los
ciudadanos (Arias, 2018; Cantor, 2018; Gómez & García, 2018 citado por Gutiérrez y

Buitrago 2019).

Las acciones que los docentes deben seguir para logar un éxito se remiten a
actividades de análisis, toma de decisiones, evaluación, intervención etc., pero para lograr el

éxito en el desarrollo de las habilidades socioemocionales se requiere actuar de forma
reflexiva, segura y autónoma y así poder tomar decisiones que involucren al aprendizaje, la

convivencia y el bienestar, tanto en su vida personal como en su vida laboral dentro de las

escuelas.
Esta perspectiva requiere, sin lugar a dudas, la interacción y guía del docente como

principal mediador escolar de estos ambientes de paz, quien acude al llamado propio de su
ejercicio pedagógico, el cual lo invita a ser agente de transformación, observador de

realidades y, sobre todo, ejemplo de actitudes y relaciones democráticas y de convivencia